A todos nos gusta pensar que somos personas decentes. Por ejemplo, si nos metemos en un accidente de automóvil, esperamos asumir la responsabilidad, incluso si eso significa correr el riesgo de ser acusados penalmente. Pero la realidad es que muchos conductores optan por huir de la escena en lugar de detenerse para ayudar a un automovilista, ciclista o peatón herido.
De hecho, según un reciente reporte por la Fundación AAA para la Seguridad del Tráfico, se reportaron más de 2,000 accidentes de “atropello y fuga” en los EE. UU. durante 2016, lo que representa el total más grande desde 1975, cuando el gobierno federal comenzó a rastrear tales accidentes como una categoría separada. Esto equivale a un accidente de atropello y fuga cada 43 segundos. Y según numerosos otros estudios, Sólo aproximadamente la mitad de los conductores que se dan a la fuga son identificados y capturados por la policía..
¿Por qué un conductor no se detendría?
Es fácil citar estadísticas. Pero es más importante considerar a las víctimas de accidentes automovilísticos con fuga. Recientemente, un ciclista murió en Kyle, Texas, justo al sur de Austin. De acuerdo a reportes de noticias, la víctima era un hombre de 53 años. La policía describió el vehículo como un “Kia gris carbón con daños en el parachoques del lado del pasajero delantero” y le faltaba el espejo del lado del pasajero. Al momento de escribir este artículo, el conductor que se dio a la fuga no ha sido identificado ni arrestado.
Casos trágicos como este a menudo llevan a la gente a preguntarse: “¿Por qué alguien simplemente dejaría a una persona inocente muerta al costado de la carretera?” Todavía no sabemos la respuesta a esta pregunta en el caso del accidente de Kyle, TX. Pero hablando de manera más general, estas son algunas de las razones que hemos identificado entre los conductores que se dieron a la fuga y que finalmente fueron atrapados:
- El conductor no tenía licencia de conducir válida.
- El conductor conducía con licencia suspendida.
- El conductor tenía miedo de obtener demasiados puntos en su licencia.
- El conductor había estado bebiendo o consumiendo drogas justo antes del accidente y no quería correr el riesgo de ser acusado de DWI.
- El conductor no tenía seguro de automóvil.
- El conductor temía que lo arrestaran por una orden judicial pendiente.
- El conductor conducía un vehículo robado.
- El conductor conducía un vehículo perteneciente a su empleador y no quería que su jefe se enterara de que había tenido un accidente.
Obviamente, Ninguna de estas excusas jamás justifica abandonar el lugar de un accidente. Y de hecho, aparte de la posible responsabilidad civil, una persona acusada de huir de la escena después de un accidente que involucró lesiones corporales graves o la muerte puede ser acusada de un delito grave de tercer grado. De acuerdo a Código Penal de Texas 12.34, las penas de delito grave de tercer grado incluyen 3 años de prisión y/o una multa de hasta $10. Sin embargo, en el calor del momento, muchos conductores que se dan a la fuga no piensan en hacer lo correcto y, en cambio, actúan basándose en el miedo.
Presentar un informe policial después de un incidente de atropello y fuga
Si alguna vez es víctima de un accidente de atropello y fuga, es importante presentar un informe policial detallado. Proporcione siempre a la policía tantos detalles como pueda sobre el conductor, el vehículo y cómo se desarrolló la escena. También es útil identificar a los testigos en el lugar que puedan proporcionar información adicional.
Su próximo paso debería ser ponerse en contacto con un Abogado de accidentes de atropello y fuga en Austin quien puede ayudarlo a investigar la identidad de su conductor que se dio a la fuga y ayudarlo a buscar beneficios de seguro y daños adicionales. Contacta con DJC Law llamando (512) 220-1800 y descubra cómo un abogado especializado en lesiones personales puede ayudarle.